Reporte de investigación
Permanent URI for this collection
Browse
Browsing Reporte de investigación by Author "Altamirano Cárdenas, J. Reyes"
Results Per Page
Sort Options
-
ItemAlternativas a la problemática ocasionada por lactosueros en el Valle de Tulancingo, Hidalgo.(Universidad Autónoma Chapingo, 2009) Gómez Alcántara, Antonio ; Cervantes Escoto, Fernando ; Altamirano Cárdenas, J. Reyes ; Garza López, Jesús Ma.El impacto más importante de las industrias agroalimentarias sobre el medio ambiente es la contaminación generada por residuos. Por lo tanto, la gestión de los mismos se convierte en el aspecto más relevante de la problemática ambiental actual de estas empresas. El sector agroalimentario es considerado por la legislación ambiental como un sector contaminante, no tanto por la peligrosidad de sus residuos, sino por la cantidad que genera. Las industrias queseras son consideradas entre las más contaminantes, por lo que deberán realizar, a corto plazo, un control integrado de la contaminación, informar de las emisiones, adaptarse a las condiciones ambientales, entre otras acciones, dentro del modelo de desarrollo sostenible que se pretende implantar a escala mundial (IDC, 2005). El objetivo de este estudio es el planteamiento de alternativas a la problemática ambiental ocasionada por lactosueros en el Valle de Tulancingo, Hidalgo, con el propósito de contribuir al fortalecimiento de la eficiencia productiva, así como prevenir y minimizar los efectos ambientales de las empresas industrializadoras de queso en la región y de esta manera aumentar su competitividad y presencia en el mercado. La necesidad de alcanzar una serie de acciones que permitan conseguir una actividad industrial en línea con el medio y la seguridad alimentaria implica establecer actividades que solventen los problemas medioambientales descubiertos, para llegar a un desarrollo sostenible a mediano y largo plazos, y mejorar la calidad de vida de la población sin poner en riesgo los valores naturales ni los patrimonios culturales.
-
ItemApertura comercial y reforma del sistema financiero rural mexicano: Consecuencia y tendencias.(Universidad Autónoma Chapingo, 1997) Santoyo Cortés, Vinicio Horacio ; Muñoz Rodríguez, Manrrubio ; Altamirano Cárdenas, J. ReyesUn sistema financiero rural es fundamental para que los agricultores puedan movilizar su ahorro, obtener financiamiento y dirigir sus inversiones hacia los usos más eficientes. En el caso de la agricultura mexicana, la ausencia de un sistema financiero rural con estas características es un lastre que impide desarrollar la competitividad del sector, aun cuando la devaluación de 1994 ha mejorado temporalmente los niveles de rentabilidad de las actividades agropecuarias. En este trabajo se presentan las transformaciones que ha sufrido el sistema financiero rural mexicano, analizando la problemática actual y haciendo énfasis en las grandes tendencias que se observan.
-
ItemRetos y oportunidades del sistema leche ante la apertura comercial.(Universidad Autónoma Chapingo, 1995) Muñoz Rodríguez, Manrrubio ; Odermatt Burry, Pius ; Altamirano Cárdenas, J. ReyesLa producción nacional de leche ha sido históricamente insuficiente para cubrir las necesidades de la población y de la industria, situación que ha obligado a recurrir a la importación creciente de productos lácteos. Para 1994 el Sistema Leche registró un Coeficiente de Dependencia Alimentaria (CDA) del 35%, cuando en 1980 era de 22%, lo cual indica un persistente incremento de la dependencia en este estratégico alimento. Esta creciente dependencia se explica, en parte, por el estilo de política que se ha aplicado en México hacia el sector lechero, al privilegiar la protección al salario del consumidor en detrimento de los precios pagados al productor, así como al poco estímulo que se ha dado a sistemas de producción, como el doble propósito, que han demostrado hacer un uso más eficiente de los recursos internos que los sistemas intensivos. Al respecto, la leche fue el producto que mayor castigo recibió en las políticas gubernamentales, estimándose que 1982—1988 recibió un Equivalente de Subsidio al Productor (ESP) negativo de 56%, es decir, se les aplicó a los productores un impuesto a la producción, en vez de un subsidio. El principal factor que explica este "subsidio negativo" es el precio. En efecto, hasta 1988, la política oficial de precios obligó a los productores nacionales a vender su leche a precios muy inferiores (hasta en 45%) a los que recibieron sus similares en EE.UU. Esta situación dio lugar a una aguda descapitalización de miles de productores lecheros, sobre todo de aquellos que producen bajo condiciones de estabulación, lo que a la postre los obligó a retirarse de la producción. Sin embargo, desde 1989, uno de los sectores que mayor beneficio ha recibido de la política de desregulación ha sido precisamente el lechero: actualmente es clara la tendencia hacia la recuperación de los precios internos pagados al productor, los cuales han superado en más de 20% a los de EE.UU., razón por la cual el Sistema—Leche presenta mejores condiciones para iniciar nuevamente su crecimiento.
-
ItemEl sistema agroalimentario localizado (SIAL): Otra visión de la lechería de la región centro de Michoacán.(Universidad Autónoma Chapingo, 2009) Bello Orbe, René ; Cervantes Escoto, Fernando ; Altamirano Cárdenas, J. Reyes ; Boucher, FrancoisEn México, la producción de leche de bovino es de gran importancia económica y social, debido a la función que desempeña como proveedor de nutrientes, generadora de ingresos y como ente aglutinador. En esta actividad coexisten unas 70 mil empresas dedicadas a la producción de lácteos, las cuales, en conjunto, generan aproximadamente 400 mil empleos permanentes (INEGI, 2002; Ángeles et al., 2004). Se caracteriza además por su diversidad ambiental y cultural, puesto que la producción de leche se desarrolla tanto en las partes altas del país como a nivel del mar, en donde es posible encontrar una gran variedad de unidades de producción (UP) cuyo tamaño oscila desde las que tienen dos o tres vacas hasta aquellas que poseen 500 o más. La producción de leche de bovino en México ronda los 10,005 millones de litros anuales, mientras que la demanda del mercado nacional de leche se sitúa en los 14,880 millones de litros al año, situación que arroja un déficit del 47.9%. En el primer semestre de 2006, fueron autorizados volúmenes de importación por 47 mil toneladas de leche en polvo y preparaciones alimenticias, circunstancia que colocó a México como el mayor importador en el mundo. Por ejemplo, la importación de leche en polvo representó el 13.9 por ciento del flujo mundial, lo cual ubicó a México como el segundo importador en el mundo de ese producto. En quesos adquirió el 8.0 por ciento y en leche fluida el 20.8 por ciento de la producción mundial (Infoaserca, 2005). La importación de leche en polvo descremada por encima de los cupos fijados en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), así como el acelerado crecimiento de importaciones de preparaciones alimenticias a base de productos lácteos y de sueros, lactosueros, quesos, yogurt y mantequilla, de manera paulatina están sustituyendo y agravando la problemática de la lechería en el país. Se estima que las importaciones de productos lácteos ocasionan pérdidas económicas por un monto cercano a 15.2 millones de pesos diarios, además de impactar de manera negativa a unos 400 mil productores al dificultar la comercialización de cuatro millones de litros de leche en el país (Comisión Especial de Ganadería, de la Cámara de Diputados, 2006). En México, al igual que en el resto de los países en desarrollo y en transición, alrededor del 80% de la leche (200,000 millones de litros por año) que consume la población proviene de los mercados informales —el proceso de comercialización se desarrolla bajo reglas que están definidas de manera implícitas en el mercado— (FAO, 2008), esto se debe en parte a la existencia de un gran número de UP de leche a pequeña escala.
-
ItemTLC y lácteos: ¿funciona el experimento?(Universidad Autónoma Chapingo, 1997) Muñoz Rodríguez, Manrrubio ; Altamirano Cárdenas, J. Reyes ; Juárez Delfina, María del RosarioHistóricamente, la balanza comercial de productos lácteos de México ha sido deficitaria, dados los considerables volúmenes de leche en polvo descremada (LPD) importados, mismos que representan el 36% del total de las importaciones mundiales y que hacen de México el primer importador mundial, seguido de Japón con 15.4%. Sin embargo, en lo que va de la década de los noventa se observa una persistente reducción del déficit comercial, debido a la disminución de las importaciones, sobre todo de leche en polvo, y un significativo incremento de las exportaciones, principalmente de leche fresca y mantequilla, aunque el valor total de las exportaciones es aún poco significativo —6 millones 754 mil dólares para 1995—, comparado con el valor total de las importaciones —383 millones 283 mil dólares—. La caída de las importaciones de LPD puede explicarse por un complejo de factores que van desde la recuperación que ha registrado la producción nacional (20% entre 1990 y 1995), la reducción de volúmenes distribuidos por la empresa paraestatal LICONSA en el marco del programa de abasto social de leche a precios subsidiados (13% entre 1991 y 1995), el incremento del precio internacional (42.4% entre 1990 y 1995), así como por la evidente contracción del consumo ante la persistente pérdida de poder adquisitivo de la población. Al igual que la LPD, otro producto que definitivamente no pudo sostener su explosivo dinamismo registrado hasta 1990 es el caso del yogur hecho en Estados Unidos, pues sus importaciones cayeron 88% entre 1990 y 1995 al pasar de 12 mil toneladas a sólo mil 440, respectivamente. La razón principal de esta drástica caída se debe principalmente a que el yogur estadounidense no corresponde a los gustos y preferencias de la población mexicana.